No hay vida más bella, que la que tú me puedes dar, entre sueños, fantasías y lunas llenas, pues ahí también te suelo encontrar. Y si para tenerte, tendré que esconderte entre duendes, hadas y cuentos, ahí yo seguiré buscándote sin que importen los demás. Dulce eternidad, te han llamado, pues dulce eres, y eterno será mi amor, para que siempre lo puedas atrapar.

Y no hubo cosa más hermosa que la vida me pudo dar, que tenerte entre mis brazos, en mi mundo real. Y quizás muchos se atrevieron a juzgarme por soñar, mientras soñaban en amor y libertad. Libre soy por soñar, Libre para amar, sin importar lo que piensen, libertad, para mi, es amar. Soñador, me han dicho, por buscar tu amor, mujer valiente, que mi alma has sabido conquistar y robar.

Nunca me pudieron frenar, si hasta te pude encontrar. Real es nuestro amor, por que contigo, ya puedo estar.